El Maestro dijo:
-" Es más fácil viajar que detenerse".
Los discípulos no comprendieron y le pidieron al Maestro que explicase el oscuro sentido de aquella sentencia.
Y entonces se expresó de este modo:
-"Porque mientras viajas hacia una meta, lo haces siempre asido y aferrado a un sueño; pero cuando te detienes, inexorablemente tu sueño se disipa como una nube ligera y debes hacer frente a la realidad".
-"Pero entonces, ¿cómo podremos ser mejores de lo que somos sino tenemos propósitos ni sueños?".
-"Serás mejor de lo que eres sin proponértelo. Lo que se transforma de modo genuino no puede ya regresar a lo que era. Enfrenta a la realidad, y, sin quererlo, se producirá el cambio, y ya nada en tí volverá a ser lo que era."
-" Es más fácil viajar que detenerse".
Los discípulos no comprendieron y le pidieron al Maestro que explicase el oscuro sentido de aquella sentencia.
Y entonces se expresó de este modo:
-"Porque mientras viajas hacia una meta, lo haces siempre asido y aferrado a un sueño; pero cuando te detienes, inexorablemente tu sueño se disipa como una nube ligera y debes hacer frente a la realidad".
-"Pero entonces, ¿cómo podremos ser mejores de lo que somos sino tenemos propósitos ni sueños?".
-"Serás mejor de lo que eres sin proponértelo. Lo que se transforma de modo genuino no puede ya regresar a lo que era. Enfrenta a la realidad, y, sin quererlo, se producirá el cambio, y ya nada en tí volverá a ser lo que era."
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