lunes, 26 de marzo de 2018

Las reglas







Aprende bien 
las reglas.
Y luego olvídalas.



Basho

viernes, 23 de marzo de 2018

Simón y Bernardo

Simón, el Maestro taoísta, tomó un nuevo examen a sus dos discípulos.
Esta vez, era acerca de unas técnicas que tiempo atrás les había enseñado.
Ese día, el Maestro se mostraba, en apariencia, injustificadamente decepcionado, y terminó desaprobando a Bernardo, el menos aplicado de los dos.
Bernardo, totalmente furioso, dejó de participar de las clases durante cinco semanas.
Al cabo de ese tiempo, volvió a su Maestro y lo increpó diciéndole:
-Maestro, todavía sigo enojado. No entiendo por qué el día del examen me dijiste que debía corregir mi mirada, cuando me habías enseñado a fijarla en el movimiento para perderme en él, y eso mismo hice; por eso, no sabía qué corregir. Después me dijiste que corrigiera mis pies, pero me habías enseñado a mantenerlos separados y eso hice; por eso, tampoco supe qué corregir. Al rato me dijiste que corrigiera mis manos, aunque las tenía ubicadas según tus indicaciones, así que otra vez, no había nada para corregir. Y en ese momento fue tal mi enojo que me desbordé; por eso, no seguí con el examen y me fui.
Lo peor fue cuando, mientras me retiraba me gritaste que tenía mucho que corregir.
¿Me puede decir que te propones?
A lo que Simón respondió:
-De ningún modo estoy interesado en corregir tus movimientos ni tus posturas. Solo estoy tratando de ayudarte a corregir tu ego.
Y Bernardo, de inmediato, comprendió.

miércoles, 21 de marzo de 2018

Los triunfos vendrán


Cuando el egoísmo no limite tu capacidad de amar.
Cuando confíes en ti mismo aunque todos duden de ti y dejes de preocuparte por el qué dirán.
Cuando tus acciones sean tan concisas en duración como largas en resultados.
Cuando puedas renunciar a la rutina sin que ello altere el metabolismo de tu vida.
Cuando sepas distinguir una sonrisa de una burla, y prefieras la eterna lucha que la compra de la falsa victoria.
Cuando actúes por convicción y no por adulación.
Cuando puedas ser pobre sin perder tu riqueza y rico sin perder tu humildad.
Cuando sepas perdonar tan fácilmente como ahora te disculpas.
Cuando puedas caminar junto al pobre sin olvidar que es un hombre, y junto al rico sin pensar que es un dios.
Cuando sepas enfrentar tus errores tan fácil y positivamente como tus aciertos.
Cuando halles satisfacción compartiendo tu riqueza.
Cuando sepas obsequiar tu silencio a quien no te pide palabras, y u ausencia a quien no te aprecia.
Cuando ya no debas sufrir por conocer la felicidad y no seas capaz de cambiar tus sentimientos o tus metas por el placer.
Cuando no trates de hallar las respuestas en las cosas que te rodean, sino en tu propia persona.
Cuando aceptes los errores, cuando no pierdas la calma, entonces…
Los triunfos vendrán a ti.




jueves, 15 de marzo de 2018

No pensando


Un discípulo le pregunta a su maestro:

¿En qué piensas? y el maestro le responde:

"En aquello que trasciende el pensamiento"

¿Y cómo haces eso?, pregunta el alumno;

y el maestro le responde:

"No pensando"

domingo, 4 de marzo de 2018

Iluminación




Maestro ¿Qué hacías antes de la iluminación? 
Cortaba leña, transportaba agua.

Maest
ro ¿Y qué haces después de la iluminación? 
Corto leña, transporto agua.