Un guerrero japonés fue capturado y
encarcelado por sus enemigos.
Aquella noche no podía dormir, porque sabía
que al día siguiente iba a ser torturado y ejecutado.
Entonces surgieron en su mente las palabras
de su maestro Zen: “El mañana no es real. Es una ilusión. La única realidad es
el Ahora. El verdadero sufrimiento es vivir ignorando este Dharma (enseñanza)”
En medio de su terror, súbitamente comprendió
el sentido de estas palabras, se sintió en paz y durmió tranquilamente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario