Pero siempre movimiento

Trabajo Interno... Pero Siempre Movimiento

¿El movimiento está totalmente ausente en las posturas fijas de Nei Gong (trabajo interno)?

Si lo pensamos bien, es casi una pregunta retórica o, si se quiere, una pregunta con "trampa".

En un ser vivo, no importa si es un hombre, un animal o una planta, algo siempre está en movimiento.

Incluso dentro de nosotros, cuando estamos acostados en la cama, inmóviles y profundamente dormidos, algo se mueve.

Mueve el diafragma y los músculos intercostales que presiden la respiración y mueven la caja torácica; la sangre circula por nuestras venas, empujada por las rítmicas contracciones del corazón; los fluidos que fluyen en el sistema linfático se mueven; una miríada de impulsos eléctricos se mueven a lo largo del sistema nervioso, algunos de ellos están en el origen de nuestros sueños...

Por lo tanto, cuando asumimos cualquier postura estática de Qi Gong, el movimiento no se detiene.

Pero incluso los movimientos inconscientes, como los relacionados con la respiración y los latidos del corazón, se observan con atención.

La mente descansa tranquilamente como cuando dormimos, pero está consciente y alerta, enfocada en monitorear toda nuestra experiencia, partiendo de una postura supervisada y alineada, mientras intenta liberar cualquier tensión innecesaria: todas esas contracciones imperceptibles que, una vez atenuadas, permiten la músculos para estirar, tendones para estirar, articulaciones para abrir.

¿Y cómo queremos llamar a todo esto, si no movimiento?

Cuando estamos quietos, cultivando una posición fija, por lo tanto, no intentamos imitar la inmovilidad de una estatua de piedra inerte, más bien pensamos en cultivar la "estabilidad" de un árbol grande y vivo.

Un árbol de raíces profundas, un tronco poderoso y ramas y hojas que responden de inmediato a cualquier pequeña brisa, a cualquier soplo de viento.

Y es precisamente este manejo fino y consciente de los "cambios imperceptibles" que ocurren constantemente dentro del cuerpo lo que constituye el corazón y fundamento de lo que en las artes marciales se llama "movimiento interno".

Fuente:  Fajin - Taijiquan & Cultura orientale