Cuando se piensa en esta disciplina sólo viene a la cabeza la idea de un ejercicio que mejorará la salud.
La mayoría de la gente lo piensa así y concurre a las clases en busca de esto mismo.
Jamás ninguno de ellos pensaría que se trata de un arte marcial y si lo sabe por haber oído o leído sobre el tema, le es complicado entenderla de esta disciplina de esa manera pues a las ‘artes marciales’ se las ve como una actividad en donde hay golpes, patadas, lances, etc.
Sin embargo esto no es más que el producto del desconocimiento que hay sobre el Taijiquan e incluyo aquí, a muchos que fueron formados dentro de los conceptos primeramente expresados.
El Taijiquan es un arte marcial, contiene golpes, patadas, lances y más técnicas correspondientes a las artes de lucha.
Muchos se preguntan…
¿Cómo es el boxeo en el Taijiquan?, ya que resulta difícil el entender que esos movimientos lentos y relajados pueden actuar en un ataque o como defensa.
Cuando se llega a esta pregunta mi respuesta es que se ignora la esencia del sistema ya que allí está todo expresado y la razón por la que no se desarrolla se debe al esfuerzo que implica el entrenamiento para alcanzar las habilidades que permitan utilizar al Taijiquan como un arte de combate.
Por ejemplo, se entiende que un estudiante que entrena cualquier otro tipo de arte marcial realice ejercicios de fuerza, golpes contra bolsas o prácticas de combate de sparring, pero no se llega a vislumbrar esto mismo en el Taijiquan pues le parecerá que no condice con la naturaleza su naturaleza.
Insisto que esto se debe al profundo desconocimiento que existe del Taijiquan.
Las etapas de aprendizaje como en toda actividad tiene sus inicios, su etapa intermedia y su etapa avanzada.
Solo pasando por éstas de manera regular y concienzudamente es como se alcanza y se entiende como adquirir las habilidades que luego determinarán la forma de boxeo que el Taijiquan expresa.
Nadie puede creer que una persona podrá ir a la universidad si no ha pasado por todos los estamentos previos, la escuela primaria, secundaria y luego después la universidad; pero pareciera que muchos piensan que se puede llegar a la universidad solo por haber leído mucho.
Esta confusión es la que hoy presentan aquellos que quieren llegar a esa etapa, pero no están muy predispuestos a abordar un necesario entrenamiento y estudio intenso para alcanzar tal fin.
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