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Los hombres de
la antigüedad conocían el Tao y conformaban sus vidas a la armonía del Yin y
Yang, viviendo en completo acuerdo con los ritmos de la naturaleza.
Observaban
moderación en la comida y la bebida, regularidad en su vida cotidiana, y no
se violentaban de forma imprudente.
Como resultado,
tenían una larga vida.
Pero hoy la
gente es distinta.
Su vida
cotidiana es irregular, comen y beben indiscriminadamente
sin saber que deben evitar, y no observan ninguna moderación.
Se entregan a la
disipación, se regalan con alimentos ricamente sazonados, hacen caso omiso
del feliz término medio y se muestran siempre insatisfechos con lo que
poseen.
Como resultado,
los hombres de hoy quedan arruinados antes de llegar a los 50 años.
Hu Szu-hui
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Párrafo extraído de un tratado médico sobre las artes de
cultivar la vida, escrito por el médico de la corte Hu Szu-hui para el
emperador reinante en el año 1330.
Fuente:QI GONG
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jueves, 18 de junio de 2020
Los hombres de la antigüedad conocían
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