jueves, 10 de octubre de 2024

El hilo del Tai Chi

Alguien decía que se sentía como una marioneta al hacer Tai Chi Chuan. 
Un hilo que sale de la coronilla nos conecta con el cielo. 
Si miramos hacia arriba, se pierde entre las nubes. 
Ese hilo atraviesa el cuerpo, por la columna y nos conecta con la tierra. 
Si miramos hacia abajo, entra en la tierra como la raíz de una planta. 
De las muñecas surgen hilos que una fuerza no muscular maneja. 
De las crestas Iliacas surgen otros dos hilos que nos hacen girar.
Este hilo es muy flexible. 
Si nos sentamos en el suelo, la parte superior de hilo se estira hacia abajo.
Si saltamos, la parte inferior del hilo también se estira.  
Este hilo nos asegura nuestro lugar, siempre entre la tierra y el cielo, en conexión con los puntos cardinales, los chinos sabían, por su teoría de las correspondencias que somos seres conectados con la totalidad.


El  principio de totalidad, hizo que el Maestro Cheng Man Ching escriba
"La aplicación de Chi y energía (chin) en  TaiChi es lenta y continua, cíclica y repetitiva, circular y conectada entre sí. 
Es inagotable, tan grande como la revolución de los planetas y tan sutil como las gotas de lluvia o de rocío.
TODAS SUS FORMAS SON REDONDAS, un signo de la unión con la naturaleza.
Su esencia, función y sutil energía interna están íntimamente relacionadas con el arte de Taichi"

 

martes, 8 de octubre de 2024

Sencillo Y Flexible.


 

 

 

 

 

Hace algunos años llegó a un monasterio tibetano del norte de la India un monje procedente de Tailandia, perteneciente a la antigua escuela Theravada, e, ilusionado, pidió permiso para meditar con los demás.

Colocándose al final de la Gompa (sala de meditación) se sentó dispuesto a empezar la sesión cuando, de repente, descubrió con sorpresa que el resto de monjes comenzaban la entonación de la toma de refugio, cuatro pensamientos inconmensurables y la recitación de varios sutras.

Encogiéndose de hombros, decidió meditar por su cuenta, alcanzando pronto un profundo Shamadi donde pudo contemplar con claridad la naturaleza de los fenómenos y la esencia pura de la mente, aprehendiendo un nuevo estado de paz antes desconocido.

Cuando, al cabo de un rato, uno de los monjes hizo sonar la campanilla que anunciaba el final de la sesión meditativa, aquel hombre estaba ya a las puertas de la iluminación.

Algunos, que se dieron cuenta de que el extranjero irradiaba una extraña claridad, se interesaron por él y por su práctica.

A lo que el hombre confesó:

- Cuando hay que meditar, medito.

Cuando hay que estudiar los sutras, los estudio.

Cuando hay que reflexionar sobre ellos, reflexiono.

No realizo una práctica tan larga que llegue a agotarme, ni tan corta que no pueda saborear sus tesoros.

No me pierdo en rituales, ni en tradiciones de hombres.

Medito para conocerme a mí mismo, no para imitar a otros.

Medito para transformar mi mente y liberarla, no para cargarla de cadenas o para cambiar unas por otras.

 Ustedes pierden demasiado tiempo en formalismos, haciendo rígido y duro lo que por esencia siempre fue sencillo y flexible.


 

miércoles, 2 de octubre de 2024

Rutina de ejercicios mentales de Bruce Lee

 

Ésta era la rutina de ejercicios mentales de Bruce Lee para fortalecer el espíritu

A más de 40 años de su muerte, los ejercicios mentales que Bruce Lee repetía todos los días salieron a la luz.

Bruce Lee, nacido el 27 de noviembre de 1940 en San Francisco, California, fue el primer gran exponente de las artes marciales en Occidente. Cada día llevaba a cabo una rutina de ejercicios mentales y físicos para fortalecer el cuerpo y el espíritu, que eran la base de su estilo de vida.
Como artista, filósofo, y revolucionario pensador que se decidió a difundir en todo el mundo las artes marciales que antes eran solo patrimonio oriental, fue seguido y admirado por muchas personas.
Pero Bruce Lee murió repentinamente en 1972, en circunstancias no del todo claras, a la corta edad de 32 años. Ese tiempo fue suficiente para que aun hoy sea recordado.

Bruce Lee llevaba siempre un cuaderno de notas en donde escribía pensamientos y registraba lo importante. Esas anotaciones fueron recuperadas hace poco tiempo, y salieron a la luz en los medios de comunicación.
Una de las cosas más interesantes que se encontraron fueron las descripciones de la rutina de ejercicios mentales que Bruce Lee realizaba para fortalecer su espíritu y su cuerpo. Aquí puedes leer su rutina de ejercicios:

Rutina de ejercicios mentales

Sobre la fuerza de voluntad
“Reconocer que la fuerza de voluntad es la corte suprema de todos los departamentos de la mente. Lo ejercitaré todos los días, cuando me urja una acción con propósito; y lo haré un hábito diseñado para convertir el poder de mi voluntad en acción al menos una vez al día.”
Sobre la emoción
“Darme cuenta de mis emociones positivas y negativas y formarme el hábito diario de promover el desarrollo de las EMOCIONES POSITIVAS, y ayudarme a convertir las negativas en algún uso positivo.”

Sobre la razón
"Reconocer que mis emociones positivas y negativas podrían ser peligrosas si no son controladas y guiadas por un fin deseado, voy a deponer todos mis deseos, mis objetivos y propósitos bajo las facultades de la razón, y seré guiado por ella al expresar todo esto.”

Sobre la imaginación
“Reconocer la necesidad de decir mis planes y mis ideas para obtener mis deseos, desarrollaré mi imaginación apelando a ella para que me ayude en la formación de mis planes.”

Sobre la memoria
“Reconocer el valor de una memoria alerta, voy a propiciar que la mía esté alerta preocupándome por imprimirle claramente todos los pensamientos y deseos a recordar, y asociando esos pensamientos con los objetivos relacionados, los cuales traeré a mi mente con frecuencia.”

Sobre el subconsciente
“Reconocer el poder de mi subconsciente sobre mi voluntad, debo presentarle una imagen definitiva de un PROPÓSITO PRINCIPAL en la vida y de todos los propósitos menores que conducen al propósito mayor, y debo mantener esta imagen CONSTANTEMENTE ante mi subconsciente y REPETIRLA DIARIAMENTE.”

Sobre la conciencia
“Reconocer que mis emociones erran a menudo por su entusiasmo excesivo, y mi facultad de la razón a menudo carece de los sentimientos necesarios para permitirme combinar la justicia con la piedad en mis juicios, le pediré a mi conciencia que me guíe en lo que es correcto e incorrecto, pero nunca echaré a un lado su veredicto, sin importar cuál sea el costo de asumirlo.” 


Estas reflexiones, profundas y complejas, pero a la vez fáciles de entender, reflejan el esfuerzo que Bruce Lee hizo para traducir las enseñanzas milenarias de las disciplinas orientales para que pudieran ser adaptadas a la vida occidental. 

¿Por qué no elegir una de ellas y comenzar a implementarla cada día? 

Autor desconocido