La forma es lo que la mayoría de la gente asocia a Tai Chi.
Se trata de una serie de movimientos que normalmente, pero no siempre, se ejecutan lenta y pausadamente a una velocidad que permite que el practicante esté totalmente atento a cada parte de su cuerpo en movimiento.
Cualquiera que sea el estilo de familia practicado (Chen, Yang y Wu son los más conocidos) las líneas básicas de ejecución de la forma se encuentran en los llamados clásicos del Tai Chi, uno de los cuales se atribuye a Chang Sang Feng, de quien se dice que fundó el arte en la dinastía Sung .
Estos principios, a tener en cuenta durante la realización de la forma, son, resumidamente, los siguientes:
1. Debe existir un sentido de coordinación global; el cuerpo debe actuar como una unidad.
2. Los pies deben estar firmemente enraizados, con el resto del cuerpo relajado, pero no flojo, para que el Chi pueda penetrar. La cadera y la cintura dirigen el movimiento para que la energía confluya en el Tan tien.
3. Cada gesto y paso será calmo e ininterrumpido. La respiración no forzada y suave.
4. La atención se dirigirá a izquierda y derecha, delante y atrás, arriba y abajo, dentro y fuera, lo lleno (lo substancial) y lo vacío (lo insubstancial); en otras palabras el Yin y el Yang deben distinguirse con nitidez y debe evitarse su exceso o falta.
Casi todos los movimientos de las distintas formas cortas y largas de los diversos estilos son fácilmente identificables por aquellos que están familiarizados con las artes marciales como técnicas de combate; una combinación de puñetazos, bloqueos, llaves, desviaciones, proyecciones, patadas y golpes que han sido destilados del contexto de la lucha y modificados en una serie continua y fluida semejante a una danza ritual.
De ahí la descripción popular de la forma como boxeo de las sombras….
Tew Bunnag
El Arte del Tai Chi Chuan
Meditación en movimiento
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