Si aceptas lo
que tienes, no hay ninguna posibilidad de ser infeliz.
Nadie parece
interesarse por sentirse feliz porque están dispuestos a sacrificar toda su
felicidad por cualquier tontería: por celos, posesividad, ira, odio, etc., sin
embargo, no están dispuestos a sacrificar estas pasiones por su felicidad, en
resumen, solo les interesa su infelicidad.
En un mundo
donde la infelicidad no existe, el hombre ha creado muchísima infelicidad.
Realmente ha
demostrado ser un auténtico creador, porque es un maestro creando infelicidad,
muy creativo, muy ingenioso…solo que creando infiernos.
La felicidad es
algo sencillo, no necesitas nada para crearla, solo necesitas estar presente y
ser feliz.
Si no aceptas
lo que tienes y lo que hay, serás infeliz.
Dices que
quieres ser feliz, pero sigues rechazándolo todo.
¿Cómo vas a ser
feliz?
Simplemente
acepta las cosas y entonces fíjate en donde surge la infelicidad.
Puedes esperar
durante varias vidas, pero la infelicidad no aparecerá porque habrás cortado
sus mismas raíces.
Quieres la
felicidad de acuerdo a tus condiciones y premisas.
En realidad no
te interesa ser feliz, sino ¿Por qué pones condiciones y premisas?
Podrías decir:
“Estoy dispuesto a ser feliz, tanto como lo pueda ser, porque quiero ser
feliz”, pero en cambio lo que dices es: “No, se han de cumplir mis condiciones”
y luego pones unas condiciones complejas.
Tienes a
alguien que amas, podrías ser feliz ahora mismo.
Pero pones la
condición de que tu amada o amado, ha de prometerte de que te amará por siempre
y para siempre.
¿A qué viene
esto?
¿Cómo va
alguien a prometértelo? si nadie conoce el futuro, ni siquiera los dioses
podrían prometértelo, porque una promesa implica fijar el futuro, y el futuro
no es fijo, porque se transforma de infinitas maneras.
De modo que esa
persona se ve obligada a prometerte algo que es imposible, y tú sabes que es
una mentira, te estás engañando.
Lo sabes porque
también eres un ser humano y eres consciente de que no se puede asegurar el
futuro.
Estás exigiendo
algo imposible y al exigirlo estás destruyendo la felicidad.
Cuando observas
lo dicho, más real se vuelve el hecho de que nadie parece tener interés por ser
feliz.
La felicidad es
una función del aceptar lo que hay.
Osho.